Crema de Calabaza y Manzana con Chips de Kale

Este año, otra vez, nos hemos quedado sin otoño. Hemos pasado de estar bañándonos en la playa un día, a tener que sacar el abrigo al día siguiente. En Nerja llueve muy poco, poquísimo, mucho menos que en el resto de la provincia de Málaga. Será por su situación geográfica, resguardada por la Sierra de Almijara, no lo sé, pero muchos de los días que está lloviendo en los pueblos de alrededor, en Nerja no cae una gota. Bueno, pues ayer llovió como si no hubiera un mañana…. !!!sin parar durante todo el día!!!

Es bueno que llueva y a mi me encanta ver llover (qué voy a decir yo si ¡!soy de Bilbao!!), pero de golpe y porrazo, de un día para otro, nos hemos visto metidos en el invierno. Ayer por la tarde, tuvimos que encender la calefacción en el salón. Impensable en un mes de octubre.

Por eso, ya apetecen platos de cuchara, sopitas y cremas, comida reconfortante… y por unos días nada más, vamos a dejar aparte las ensaladas y gazpachos varios… Y por eso hoy os he preparado una deliciosa crema de calabaza. Otra versión de esta crema, que a mi me ha parecido la mejor…. bueno no sé, ¡!me gustan todas!!

Parece mentira que, con un ingrediente tan soso en apariencia, se puedan hacer tantas variedades de crema. Con ésta, ya tengo publicadas tres recetas de crema de calabaza, dos risottos y muchas recetas en las que interviene este ingrediente. Y dos cremas de calabacín, su primo hermano, que también son deliciosas.

En esta ocasión la receta es del blog “The luminous kitchen” y siendo una receta tan sencilla, al encontrarla, no me quedó más remedio que probarla. Un acierto. La manzana siempre aporta acidez, que contrasta estupendamente con el dulzor de la calabaza y los chips de kale, aparte de aportar textura, añaden valor nutritivo al plato. Por cierto, ya sabréis que ahora el kale se encuentra en los supermercados en bolsas, como las lechugas. Yo lo compro en Mercadona.

Ingredientes :

1 Cebolla

1 kilo de Calabaza (butternut)

1 Manzana Granny Smith

1 cucharada de Jengibre molido

1 cucharada de Comino molido

2 cucharadas de Vinagre de Manzana

1 hoja de Laurel

2 litros de Caldo de Pollo

Hojas de Kale

Sal

Pimienta Negra

100 ml de Crema fresca (Crème Fraîche)

Aceite de Oliva Virgen Extra

Preparación :

Empezamos preparando todos los ingredientes. Pelamos la cebolla y la cortamos en trozos pequeños, regulares. Hacemos lo mismo con la calabaza y con la manzana. Tendremos preparado con antelación el caldo de pollo, siguiendo esta receta. Las hojas de kale deberán estar limpias, bien secas y troceadas. Precalentamos el horno a 220ºC.

Para hacer la crema cubrimos el fondo de una cazuela con aceite y la ponemos al fuego. Echamos la cebolla en la cazuela y dejamos que se rehogue durante 2 minutos a fuego medio. Entonces le añadimos la calabaza troceada. Mezclamos todo bien para que la calabaza se impregne del aceite y dejamos cocinar lentamente unos 4 minutos.

Incorporamos la manzana, las especias y la hoja de laurel, salpimentamos y dejamos que se integren todos los ingredientes, removiéndolos con cuidado. Vertemos el caldo de pollo en la cazuela junto con las dos cucharadas de vinagre de manzana. Lo llevamos a ebullición y dejamos que hierva suavemente unos 30 minutos, hasta que la calabaza esté muy tierna.

Mientras se cocina la crema, preparamos los chips de kale. Ponemos las hojas de kale bien limpias, secas y troceadas en un bol y las rociamos con un poco de aceite, una cucharada de vinagre y sal. Cubrimos una bandeja con papel de horno y extendemos el kale por toda la superficie. Metemos la bandeja al horno unos 10 minutos, para que el kale se seque, pero vigilándolas todo el tiempo, para que no se tuesten por los bordes. Las sacamos del horno y reservamos.

Cuando la calabaza esté lista, retiramos la hoja de laurel de la cazuela, incorporamos la crema (dejamos un poco para decorar) y trituramos el contenido, hasta obtener una crema lisa y brillante. Si hiciera falta la colamos, para que no tenga ningún grumo. Rectificamos de sal y pimienta.

Servimos la crema decorándola con un hilo de crema agria y poniendo unos chips de kale en el centro del plato.