Ingredientes :
500 grs de Harina de
Fuerza
15 grs de Levadura
fresca
5 grs de Sal
130 grs de Azúcar
2 Huevos
120 grs de Leche
Ralladura de 1 Naranja
1 cucharada de Agua de
Azahar
100 grs de Mantequilla
1 Huevo
Azúcar
Preparación :
Ponemos todos los
ingredientes, menos la mantequilla, en el recipiente de la amasadora.
Utilizamos el gancho para amasar y vamos amasando hasta obtener una masa lisa,
pero muy pastosa, muy seca. Entonces añadimos la mantequilla a temperatura
ambiente, en varias veces y seguimos amasando, hasta obtener una masa lisa,
brillante y elástica. Podemos amasar pocos minutos y dejar en reposo la masa
otros tantos minutos. Y así poco a poco, la masa estará amasada pasado un rato
largo, porque como cualquier masa de bollería, tarda en desarrollar el gluten. Este
proceso se puede realizar también a mano.
Una vez que la masa
esté lista, formamos una bola y la dejamos reposando dentro de un recipiente engrasado,
tapado con film transparente, dentro de la nevera, toda la noche.
Por la mañana sacamos
el recipiente del frigorífico y dejamos que la masa se atempere y empiece a
levar, hasta que haya duplicado su volumen. Dependiendo de la temperatura ambiente,
tardará unas 2 horas.
Volcamos la masa del
recipiente sobre la encimera y dividimos la masa en dos partes iguales. Guardamos
una de las partes, cubierta de film transparente. El trozo que hemos dejado
fuera, la dividimos en dos, pero esta vez una parte será 1/3 de la masa y la
otra, los 2/3 restantes. El primer tercio, lo dividimos a su vez en cuatro
trozos iguales.
Con el trozo grande
formamos una bola, cerrando bien la base y la ponemos sobre un papel de horno,
en una bandeja. Con uno de los 4 trozos pequeños, hacemos lo mismo, formamos
una bola pequeña y la colocamos también en la bandeja. Con los otros tres
trozos, formamos lo que serán los huesos que se cruzan sobre el bollo.
Estiramos cada trozo formando un cilindro de unos 20 centímetros y marcamos
tres hendiduras, de manera que se formen cuatro trozos iguales, sin llegar a
separarse. Los ponemos también en la bandeja. Dejamos fermentar todos los
trozos, tapados con un paño, hasta que dupliquen su tamaño.
Cuando estén listos,
formamos el pan de muerto. Ponemos la bola grande de masa encima de un papel de
horno, en el centro de una bandeja de horno. Con mucho cuidado, ponemos los “huesos”
de masa sobre la bola. Colocamos la primera, pegándola bien a las paredes del
bollo. Y las otras dos las cruzamos por encima, de manera que queden colocadas
a la misma distancia. Tienen que quedar bien colocados y los extremos pegados a
la base, para que no se muevan.
Ponemos la bolita
pequeña encima de todos los “huesos” y nos aseguramos de que queda bien
asentada. Se pegan muy bien, la masa es muy grasienta, lo malo es que si nos
equivocamos, no tiene remedio, no se puede deshacer el “pegado”. Tendremos que
montar el bollo con mucho cuidado. Dejamos fermentar el bollo otros 20/30
minutos, tapado con u paño.
Precalentamos el horno
a 200ºC sin aire. Cuando el bollo esté listo, lo pincelamos con huevo batido,
para que al hornearlo, brille toda la superficie. Si nos apetece, lo
espolvoreamos con azúcar. A mí me parece más bonito así, solo con huevo batido,
más brillante.
Metemos el bollo al
horno y lo horneamos a esa temperatura, durante 20 minutos. Bajamos la
temperatura a 180ºC. y lo horneamos otros 10 minutos. Si se tuesta demasiado,
lo cubrimos con papel de aluminio, pero tenemos que hornearlo un mínimo de 30
minutos en total.
Lo sacamos del horno y
lo dejamos enfriar sobre una rejilla. Con la mitad de la masa que habíamos
dejado bien cubierta, al principio, habremos seguido los mismos pasos, al mismo
tiempo, de manera que al final horneamos dos panes de muerto.
Si, ya se que se me ha
pasado la fecha…. Este pan, es típico de la Fiesta de los Muertos de Mexico,
que se celebra la noche del 31 de octubre. He estado unos días fuera y no fue posible
publicarlo en fecha (qué mala cobertura hay en el campo…..). Pero no por eso voy a dejar de publicarlo, porque llevo haciendo esta receta varios años y
por una cosa u otra, nunca acabo de publicarla.
Así que este año,
aunque sea fuera de fecha, aquí tenéis el pan de muerto que he preparado este
año. Bueno, uno de los panes de muerto que he hecho…. Porque este bollo gusta
tanto, que cada año preparo unos pocos…. Es un bollo delicioso, suave, sabroso
y con una forma muy original.
A mi, siempre se me
desmorona un poco al hornearlo y esto no es nada más que impaciencia. El pan de
muerto se desmorona cuando no está lo suficientemente fermentado y acaba de
fermentar en el horno. Crece demasiado y pierde la forma…. Pero esto no afecta
al sabor ni a la textura….. así que siguen estando de muerte!!!!!.... nunca
mejor dicho.
La receta que he
utilizado es la que publicó Miriam Garcia del blog “El invitado de invierno” en
la página de “María Lunarillos”. Ya sabéis que las recetas de Miriam tienen
garantía de éxito, siempre están muy bien explicadas y las fotos son únicas, sin duda, de lo más
bonito de la red, no créeis?
3 comentarios
buenisimoooooooo
ResponderEliminarGanas le tengo yo a este pan, te ha quedado bien ricooo.. bsss
ResponderEliminarBollería casera es sinónimo de calidad y buen comer, qué delicia. Tampoco se ha desmoronado tanto...te doy un 10!
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