Ingredientes : 400 grs de Lentejas 1 Cebolla 2 dientes de Ajo 2 Zanahorias 1/2 cucharadita de Tomillo 1 hoja de Laurel 100 ml de Vinagreta (Aceite, vinagre, mostaza de Dijon, sal) Sal Pimienta Negra Aceite de Oliva Perejil picado 4/8 Salchichas de Cerdo Preparación : En una cazuela de base gruesa cubrimos el fondo con aceite. Picamos la cebolla y el ajo en brunoise y la zanahoria en cuadraditos. Ponemos la cazuela a fuego medio y añadimos las verduras picadas. Rehogamos y dejamos pochar. Cuando estén tiernas las verduras echamos las lentejas y las cubrimos con agua, hasta 2,5 cm por encima de ellas. Las llevamos a ebullición y si es necesario las espumamos. Añadimos el tomillo y el laurel, y salpimentamos. Cubrimos la cazuela con la tapa, bajamos el fuego y lo dejamos hervir durante 15 minutos. Destapamos la cazuela y dejamos hervir durante 20 minutos más, ó hasta que las zanahorias y las lentejas estén tiernas. Las lentejas tienen que quedar con poco agua, si tuvieran mucha la retiramos, y si les faltara durante la cocción, les añadimos un poco más hasta acabar de cocerlas.
Mientras tanto untamos las salchichas con aceite y las ponemos en una fuente de horno. Encendemos el grill al máximo y horneamos las salchichas, dorándolas por todos lados. Las reservamos en caliente. Preparamos la vinagreta al gusto de cada uno. Ponemos las lentejas en una fuente, vertemos la vinagreta y removemos bien. Espolvoreamos con perejil picado y ponemos las salchichas bien calientes por encima.
Esta es una forma diferente de comer lentejas. Están deliciosas y acompañadas de unas buenas salchichas alemanas se convierte en un plato redondo. En mi casa, procuramos comer un día a la semana legumbres, como mínimo, y es bueno ir variando las recetas, para no cansarse…..y de vez en cuando, comerlas de la forma tradicional.
La receta, una vez más, es del libro “La cocina francesa”, ese que os hablé en la receta del “Pollo con salsa de estragón”, y estad seguros que vais a ver muchas recetas más, por que es un libro que no tiene desperdicio. En la receta original, utilizan las Lentejas de Puy, que para los franceses son como nuestras lentejas pardinas, que por supuesto son las que yo he utilizado.
The November 2009 Daring Bakers Challenge was chosen and hosted by Lisa Michele of Parsley, Sage, Desserts and Line Drives. She chose the Italian Pastry, Cannolo (Cannoli is plural), using the cookbooks Lidia’s Italian-American Kitchen by Lidia Matticchio Bastianich and The Sopranos Family Cookbook by Allen Rucker; recipes by Michelle Scicolone, as ingredient/direction guides. She added her own modifications/changes, so the recipe is not 100% verbatim from either book.
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Ingredientes :
250 grs de Harina 2 cucharadas de Azúcar 1 cucharadita de Cacao en polvo ½ cucharadita de Canela ½ cucharadita de Sal 3 cucharadas de Aceite de Oliva 1 cucharadita de Vinagre Blanco ½ vasito de Vino Dulce de Málaga 1 clara de Huevo Aceite de Girasol Crocanti de Almendras Azúcar Glas Cáscara de Naranja
300 grs de Queso Philadelphia 250 grs de Azúcar glas ½ cucharadita de canela 1 cucharadita de Extracto de Vainilla
Preparación :
En el recipiente de la amasadora mezclamos la harina, el azúcar, el cacao. La canela y la sal. Vertemos el aceite, el vinagre y el vino y mezclamos bien hasta conseguir una masa suave y homogénea. Hacemos una bola con la masa y la cubrimos con un film transparente. La guardamos en el frigorífico por lo menos durante dos horas, ó mejor toda la noche.
Cortamos la masa en dos partes y guardamos una de ellas en el frigorífico mientras trabajamos con la otra. Amasamos con rodillo hasta conseguir una superficie fina y lisa. Buscamos un cortapastas circular con un diámetro inferior al largo de los tubos para hacer los rulos. Cortamos la masa en círculos y los estiramos con el rodillo, dándoles un poco de forma ovalada. Cuando más fina sea la masa, quedarán mejor los cannoli.
Cubrimos de aceite la superficie de los tubos, y enrollamos la masa sobre ellos, presionando los bordes y pegándolos con la ayuda de la clara de huevo.
Ponemos aceite en una sartén a fuego medio alto. Freímos los rollitos con cuidado, para que se doren por todos lados. Les vamos dando la vuelta con ayuda de dos espátulas de madera y los retiramos a un papel absorbente en cuanto estén listos. En cuanto se enfríen un poco, retiramos los tubos con cuidado y seguimos friendo, hasta terminar con toda la masa.
Para el relleno yo he utilizado la crema de queso con vainilla. Se mezclan todos los ingredientes, batiendo bien, hasta que la masa sea homogénea y rellenamos una manga pastelera con boquilla rizada. La dejamos enfriar en el frigorífico para que tenga más consistencia.
Rellenamos los canutillos por los dos lados y cubrimos con la almendra crocanti. Espolvoreamos con azúcar glas y decoramos con virutas de cáscara de naranja.
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Los cannoli son unos pastelitos Italo-americanos, que a diferencia de los canutillos que nosotros solemos hacer con hojaldre, se fríen en abundante aceite. Es una masa muy buena, con un sabor a canela, de los que te dejan un gustito en la boca, que te invita a seguir comiendo….Y el punto del vino dulce está buenísimo. El original es con vino de Marsala, pero una siempre barre para casa…ya sabeis.
Los rellenos y de la decoración pueden ser infinitos, cada uno a su gusto. La próxima vez voy a probar con una crema de chocolate ó trufa….tienen que estar buenísimos. O con una crema de naranja y almendras…..voy a dejarlo, que como siga, me voy a tener que poner a hacer otros…..
3 Patatas medianas 1/2 l de Salsa Española 2 Huevos Harina Aceite de Oliva Sal
Preparación :
Antes que nada preparamos la salsa, según vemos en este enlace. Una vez hecha, la ponemos en una fuente refractaria.
Pelamos las patatas y las lavamos. Las cortamos en rodajas de 1 cm de grosor aproximadamente. Por eso es mejor que la patata no sea muy grande, para que no salgan rodajas excesivas, aunque siempre las podemos cortar por la mitad.
Salamos las patatas y las rebozamos, primero por harina y luego las pasamos por huevo batido. Las freímos en abundante aceite, a fuego medio, para que no se quemen hasta que estén doraditas.
Las vamos sacando y poniendo en la salsa. Una vez que estén todas fritas, las dejamos hervir suavemente en la salsa, durante 25/30 minutos, para que se hagan bien las patatas por dentro. Y ya están listas para comer.
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Esta receta tan sencilla, a mi me encanta. Me gustan las patatas cocinadas de todas formas y ésta es muy fácil y resuelve un entrante estupendamente. Yo, normalmente, cuando hago salsa española, hago mucha cantidad y la congelo en porciones para utilizarla en platos así.
Esta receta, aunque es de mi madre, ella no la hacía muy a menudo, no se por qué, supongo que a ella no le gustaba mucho (a mi me pasa igual, tengo tendencia a cocinar lo que me gusta a mi…). Pero a mi no me gustaría que se perdiera, ya que es muy buena y muy tradicional. Hoy la he visto en televisión, en no se que programa y le añadían almendras picadas por encima, para darle un poco más de importancia (no solo el nombre…). También estará buenísima con jamón serrano picadito….
4 Huevos 1 vaso de Nata líquida 1 vaso de Azúcar 2 vasos de Harina 1 cucharada de Levadura Azúcar Glas Zumo de Limón
Preparación :
Batimos los huevos con las varillas y añadimos el azúcar y la nata. Seguimos removiendo e incorporamos la harina con la levadura. Mezclamos bien hasta que quede una masa homogénea.
Precalentamos el horno a 180º. Cubrimos los moldes con Bake Easy ó con margarina y los rellenamos con la mezcla, hasta un centímetro por debajo del borde. Introducimos en el horno durante 12/15 minutos ó hasta que estén dorados por fuera y bien hechos por dentro (probamos con la aguja, para ver si sale limpia). Desmoldamos y dejamos enfriar en rejilla.
Mezclamos el azúcar con el zumo de limón hasta conseguir una pasta espesa con la que cubrimos los pastelitos y dejamos secar.
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Esta receta la publicó Mª Elena del blog “Dulce y algo salado” el otro día y me gustó tanto como le quedaron, que esta mañana los he hecho. La receta es la típica del cake de nata, que en mi casa se ha hecho siempre, pero en moldes individuales. Quedan preciosos y por supuesto buenísimos.
Tenía esos moldes sin estrenar y ahora me están entrando ganas de probarlos con todo… salen tan bonitos…
Limpiamos bien las pechugas y las salpimentamos al gusto. Derretimos la mantequilla con un poco de aceite en una sartén y las freímos hasta que estén doradas por todos lados.
Precalentamos el horno a 190º. Ponemos las pechugas en una fuente refractaria y las horneamos durante 20 minutos, hasta que estén bien hechas por dentro, pero que sigan jugosas. No se tienen que secar. Retiramos las pechugas de la fuente y reservamos.
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Con el jugo que haya quedado en la fuente, preparamos la salsa. La ponemos a fuego medio con el vinagre y raspamos la fuente para separar todos los jugos adheridos. Vertemos el vino y lo llevamos a ebullición mientras seguimos removiendo. El líquido tiene que reducirse a la mitad.
Le añadimos el caldo y la mitad del estragón y lo hervimos para que reduzca. Añadimos la nata, removemos para que se ligue bien la salsa y dejamos reducir hasta la mitad. Rectificamos de sal y pimienta y añadimos el resto del estragón.
Para servirlas, cortamos las pechugas en trozos y vertemos la salsa por encima.
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Esta receta es del libro “Cocina Francesa”, un pequeño libro que me regaló mi hermana Paloma hace poco y que me tiene loca. Recoge todas las recetas de la más pura cocina tradicional francesa. Una maravilla. Últimamente mi hermana pasa mucho por la Fnac, y todos los días me trae alguna novedad….y a mi que no me gusta…..
La receta es sencilla, rápida y con un resultado estupendo. Los que comemos pollo con frecuencia, siempre estamos buscando recetas diferentes y ésta es una de las que he añadido a mi recetario. Merece la pena.
Cortamos el pan en láminas. Fileteamos los dientes de ajo. Ponemos el aceite en una cazuela y doramos un poco los ajos fileteados. Agregamos el pan, lo rehogamos bien, removiéndolo, lo cubrimos de agua y lo dejamos cocer a fuego medio durante 10 minutos.
Batimos los huevos y los añadimos. Sazonamos y removemos bien. Servimos en cazuela de barro bien caliente y acompañamos de uvas moscatel peladas.
Este plato, con un nombre genial, típico de Málaga, se diferencia en Nerja, por las uvas añadidas. Es una sopa de ajo, con los huevos batidos, y nada más. Era de lujo cuando se le añadía jamón en lonchas. y en Mijas, en vez de uvas, se le añaden aceitunas. Yo tengo que reconocer que le he echado un poco de pimentón, para darle un poco más de gusto.
Esta es mi segunda aportación que publico hoy, para el hemc de este mes de "la comida de mi pueblo". Y del corto recetario de Nerja, creo que solo me falta por enseñaros el "puchero", el "emblanco de pescado" y el "gazpachuelo". Ya os los prepararé.
Pelamos los boniatos, los lavamos y los cortamos en dados. Los ponemos a cocer con el resto de los ingredientes, a fuego medio.Cuando están tiernos, se retiran del fuego y se dejan enfriar. Se sirven con todo su jugo.
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Realmente esta receta debería hacerse con batatas, pero no es fácil encontrarlas, por lo menos ahora por aquí. Cuando fuí a comprarlas, en la frutería me dijeron que ya casi nadie las cultiva, que además de no ser rentables, no "se quieren criar en esta tierra". Por lo visto algo ha cambiado en la composición del terreno ó del agua ó del clima, que ya no es fácil cultivar batatas por esta zona. Por eso se utilizan los boniatos.
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Esta receta es mi primera contribución al hemc de este mes, dedicado a "la comida de mi pueblo". La comarca de la Axarquía no es una zona especialmente importante a nivel gastronómico, pero como cada pueblo, tiene sus recetas y sus costumbres. Ya publiqué en su día las "Migas de Nerja" y el "Potaje de Hinojos", platos muy típicos de esta zona. Con esta receta y otra que voy a publicar hoy también, tenemos una muestra de la gastronomía de la zona. Muy peculiar.
The November 2009 Daring Cooks challenge was brought to you by Audax of Audax Artifex and Rose of The Bite Me Kitchen. They chose sushi as the challenge. Parte I : Sushi Rice
Ingredientes : 2 ½ tazas de Arroz de grano corto (arroz para sushi) 2 ½ tazas de Agua 2 ½ cucharillas de Sake (vino japonés) 15 grs de Dashi Kombu (opcional) (alga desecada) 150 ml de Vinagre de Arroz (se puede sustituir por vinagre de manzana) 40 grs de Azúcar 10 grs de Sal
4 Huevos 200 grs de Mantequilla blanda 200 grs de Azúcar 200 grs de Harina 16 grs de Levadura en Polvo 2 cucharadas de Cacao puro en polvo
6 onzas de chocolate negro ó 6 de After Eight 200 grs de Azúcar Glas 1 Clara de Huevo El zumo de ½ Limón Colorante Verde Saborizante de Menta ó una cucharada de Licor de Menta Azúcar Verde para decorar
6 Mon Chéri 3 yemas de Huevo 100 grs de Azúcar Glas Colorante Rojo 1 cucharada de Licor de Cerezas 6 Guindas ó perlas plateadas para decorar
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Preparación :
Primero preparamos los muffins de chocolate. Salen doce unidades. Haremos 6 de menta y 6 de cereza.
Mezclamos por un lado la harina con la levadura y el cacao en polvo. Y por otro los huevos con el azúcar. A ésta última mezcla le vamos añadiendo la mantequilla a temperatura ambiente y después la mezcla de harina. Nos tiene que quedar una mezcla homogénea, sin batir demasiado.
Precalentamos el horno a 180º. Ponemos las cápsulas de papel que vayamos a utilizar en los moldes de muffins, para que no se deformen al hornearse. Rellenamos 6 cápsulas hasta la mitad y ponemos en cada una, una onza de chocolate ó un alter eight troceado. Terminamos de rellenarlas sin llegar al borde. Los otros 6 los rellenamos sin llegar al borde y les ponemos un Mon Cherie encima. Al pesar más, se irán al fondo durante la cocción.
Horneamos durante 20 minutos, hasta que estén bien hechos. Dejamos enfriar sobre rejilla, para poder decorarlos.
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Para preparar las coberturas, mezclamos los ingredientes de cada una, de manera que nos queden unas mezclas consistentes. Esto va a depender de la cantidad de azúcar y de los líquidos que añadamos. Podemos ir probando hasta obtener la consistencia deseada. Hacemos lo mismo con el colorante.
La cobertura de menta la esparcimos con ayuda de una espátula, alisando la superficie y cubriéndola completamente. Por encima esparcimos el azúcar verde.
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La de cerezas, la ponemos en una manga pastelera con boquilla rizada, y cubrimos el cupcake. Rematamos decorándolo con unas perlitas plateadas ó unas guindas pequeñas.
Estos cupcakes los tengo pendientes de hacer desde hace muchísimo tiempo. No he parado hasta conseguir las cápsulas plisadas y el azúcar verde. La espera ha merecido la pena.
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Las recetas son de dos blogs diferentes, las de menta de blog “Papilles et Pupilles” y las de Mon chérie del blog “Amuses Bouche”. Como la receta del cupcake era parecida, yo he hecho la de Anne, y luego he rellenado cada una diferente.
Están buenísimos, quedan muy vistosos y son una manera diferente de tomar “After Eight” y “Mon Cheri”. Para regalar son perfectos. Yo triunfé con mi vecina, la que me trae chirimoyas y aguacates…..cada uno ofrece lo que tiene.
170 grs de Harina 75 grs de Azúcar Moreno 1 pizca de Sal 1 cucharadita de Levadura en polvo 2 cucharaditas d Anís verde en Polvo. 1 Huevo 100 ml de Leche 50 grs de Mantequilla derretida 100 grs de Arándanos Azúcar para decorar .
Preparación :
Mezclamos en un recipiente los ingredientes secos (harina, azúcar, sal, levadura y anís) y en otro los ingredientes húmedos (huevo, leche y mantequilla).
Incorporamos la mezcla líquida sobre la seca, removiendo poco y con cuidado, lo justo para que desaparezca la harina. Añadimos los arándanos y los mezclamos un poco, sin remover demasiado.
Precalentamos el horno a 180º. Rellenamos los moldes de papel con la mezcla, sin llegar al bode y lo decoramos con unos granos de azúcar.
Horneamos los muffins durante 25 minutos, dejamos enfriar y ya están listos ¡!!
Esta receta es del blog “Palais des Lys”, un blog francés que me encanta y su autora es una francesa encantadora (qué por cierto no sé su nombre), que habla español y nos visitamos mutuamente (en los blogs…).
Los muffins, aunque a la vista, por su color, no son muy bonitos, son una delicia. El punto que le da el anís merece la pena probarlo. Yo he usado anís verde en hoja seca, no tengo en polvo, pero luego realmente no se nota. Y los arándanos me encantan…
Si se usan arándanos congelados es mejor no descongelarlos para usarlos, porque sueltan mucho jugo y tiñen toda la mezcla y por eso el color es un poco raro. También probé a hacerlos en moldes de silicona de madalenas, pero me gustan más en muffins.
Ponemos en un bol los huevos, cuatro enteros y las yemas de los otros dos. Les
añadimos el azúcar y la ralladura de limón. Batimos bien con las varillas hasta
conseguir una mezcla espumosa.
Ahora añadimos a esta mezcla las tres cucharadas de agua, la harina con la
levadura incorporada y la mantequilla derretida. Removemos bien hasta conseguir
una mezcla homogénea.
Los moldes que utilizamos en este caso son flaneras. Las engrasamos bien, yo lo
hago con el sprayBake
Easy, para desmoldarlos fácilmente. Rellenamos los moldes hasta ¾ de su
capacidad.
Precalentamos el horno a 180º, con calor arriba y abajo. Horneamos los
mojicones durante 25 minutos, comprobando que estén bien hechos. Los dejamos
enfriar un poco, los pasamos a una rejilla y espolvoreamos con azúcar glas.
Hace un mes, Su de “Webos Fritos”
publicó esta receta en su blog. Esa misma tarde los hice. Los había probado
hacía muy poco enCáceresy me
habían encantado. Y por supuesto, estos también. Fáciles, rápidos y buenísimos.
Ingredientes : 1 kg de Lomos de Merluza 150 grs de Guisantes 200 grs de Almejas 1 lata de Espárragos Blancos 2 Huevos cocidos 2 dientes de Ajo 1 cucharada de Maizena 1 vaso de agua Perejil picado Aceite de Oliva Sal Preparación : Limpiamos bien los lomos de merluza, quitándoles las escamas y las espinas, pasamos por agua y escurrimos sobre papel de cocina. Cubrimos de aceite el fondo de una cazuela de barro y la ponemos a fuego medio. Laminamos los dientes de ajo y los echamos al aceite, removiendo para que se doren lentamente. Añadimos perejil picado y la cucharada rasa de Maizena. Removemos con la ayuda de una cuchara de madera. Inmediatamente ponemos los lomos de merluza, con la piel hacia abajo, moviendo la cazuela con la mano, para que no se peguen los trozos al fondo. Echamos sal por encima de los lomos y añadimos los guisantes. Removemos otra vez y echamos el vaso de agua por encima de toda la cazuela, repartiéndolo todo bien. De vez en cuando pasamos una pala por debajo de los trozos de merluza, con cuidado, para ver que no se han pegado.
Ponemos en una olla a presión los restos de lentejas que nos hayan quedado de una comida. Si queda algo de chorizo o morcilla, lo añadimos también. Incorporamos todas las verduras bien lavadas, peladas y cortadas en trozos. Añadimos un chorrito de aceite, sal y un vaso de agua.
Cerramos la olla y la ponemos al fuego. Cuando empiece a subir el émbolo apagamos el fuego y esperamos a poder abrirla.
Pasamos el contenido por el pasapurés o la Thermomix. Añadimos un vasito de nata y lo mezclamos con la batidora, para que quede con una buena textura de crema. Si quedara muy espesa, le añadimos un poco más de agua.
Al servir en el plato añadimos un chorrito de aceite con guindillas (opcional), o un buen aceite de cosecha temprana y unos picatostes.
Como comprenderéis no pongo esta receta para enseñaros nada nuevo, creo que en todas las casas se han reciclado alguna vez, en puré, las sobras de las legumbres. La verdad que el resultado es buenísimo, cumplimos lo de "aquí no se tira nada" y solucionamos un primer plato de una manera fácil y sencilla. Lo tiene todo.
Por supuesto se puede hacer esta receta sin aprovechar unas sobras, usando lentejas puestas a remojo dos o tres horas antes y dejando que cuezan en la olla unos minutos más.
A mi hermano mayor, Jose, le hacía mucha gracia que en el menú del día de muchos restaurantes y bares, al puré de lentejas de toda la vida, le llamaran "Crema Esaú". Una forma de darle importancia a un plato sencillo de toda la vida.
El motivo de poneros esta receta es enseñaros la olla a presión que me tocó en el sorteo que realizó La olla suiza este verano pasado. Es una monada. Mucho más manejable que la olla que yo tenía, que es de más capacidad, pero a veces no hace falta que sea tan grande.
La olla es de la marca Kuhnrikon y es de una calidad estupenda. Si entráis en la página de esta marca, vereis que tiene muchísimos artículos de primera. Estoy encantada. Gracias Zorra.
1 ½ kg de Lomo de Cerdo 1 Cebolla grande 1 l de Leche Aceite de Oliva Sal
Preparación :
Limpiamos bien el trozo de lomo y lo atamos con hilo de cocina para que no pierda la forma. Picamos la cebolla en brunoise y reservamos.
Cubrimos el fondo de una cazuela con aceite y lo ponemos al fuego medio fuerte. Metemos el lomo dentro y lo doramos por todos lados. Añadimos la cebolla y la rehogamos bien. Salamos y removemos.
Pasados unos minutos vertemos el litro de leche y bajamos un poco el fuego. Dejamos hervir a fuego moderado una hora y cuarto aproximadamente, hasta que la carne esté tierna.
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Cuando esté terminada, retiramos el hilo de la carne, cortamos en filetes y servimos con la salsa. Lo mejor de esta receta es que el ácido de la cebolla corta la leche y queda de una textura muy especial. El acompañamiento ideal es un buen puré de patata.
Esta receta es de casa de mi madre de toda la vida. Es sencillísima y el resultado es buenísimo. Merece la pena probarlo.
A algunas personas no les gusta encontrarse la cebolla y por supuesto la salsa puede pasarse pon la batidora, pero para mi gusto pierde bastante.
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Tenía ganas ya de volver a las recetas normales…….
¼ litro de Agua 70 grs de Mantequilla Sal 1 cucharada de Azúcar 125 grs de Harina 4 Huevos 1 cucharada de Levadura Royal Aceite de Oliva Virgen Extra Azúcar glas
½ litro de Leche 5 Yemas de Huevo 2 cucharadas de Maizena 8 cucharadas de Azúcar 1 cucharadita de extracto de Vainilla